La demanda de estudios musicales está al alza en las Islas Feroe, especialmente entre los más pequeños. Para adaptarse a esta creciente necesidad; la ciudad de Tórshavn, capital del archipiélago, se puso manos a la obra para construir un nuevo conservatorio.
El concepto sobre el que se asienta el edificio es bastante novedoso: recrea dos piedras de diferente tamaño apoyadas una sobre la otra. Por lo tanto, el material exterior debía ser cuidadosamente seleccionado para estar a la altura de la idea.
“La decisión fue bastante fácil ya que la pizarra no requiere apenas mantenimiento. Además, tiene ese toque especial que expresa exceso y elegancia”, explica Mayfinn Norðoy, arquitecto en el estudio Kontrast.
El mayor de los dos edificios alberga la propia escuela musical, donde los viandantes pueden ver a los alumnos en el interior tocar sus instrumentos gracias a las grandes ventanas. Los marcos son verdes para recrear el musgo que quedaría adherido en esta piedra gigante.
En el edificio más pequeño es donde se encuentra el salón de conciertos principal, que tiene una capacidad de 300 espectadores. De nuevo, la idea fue recrear la naturaleza con piedras y vegetación, por lo que este volumen está acabado con CUPACLAD en las fachadas y césped en la cubierta.
“La pizarra natural se adapta tanto a la fachada como a la cubierta, lo que nos pareció importante porque queríamos crear la impresión de un monolito, usando el mismo material en distintas superficies”, explica el arquitecto. Si es instalada por un buen profesional, la pizarra natural puede aguantar más de cien años sin apenas mantenimiento.
CUPA PIZARRAS tiene una amplia red de expertos sobre el terreno para ayudar a nuestros clientes a encontrar la mejor solución en cada fase del proyecto. De hecho, el equipo de arquitectos a cargo del conservatorio recalcó la “buena comunicación” entre todas las partes involucradas.
Ningún otro material de construcción tiene las propiedades de la pizarra natural, que además refleja perfectamente el cambiante clima de las islas. “Cuando está húmeda, se vuelve negra y brillante, y cuando está seca se vuelve más clara y mate. Cuando el sol brilla, hay una gran diferencia entre las zonas de sol y las de sombra por la manera en la que esta piedra refleja la luz”, explica Mayfinn Norðoy.
“Cuando cae la nieve y hay hielo, de nuevo la pizarra adquiere un tono diferente con los bordes blancos y las líneas de congelación. En otras palabras, puedes saber el tiempo que hace simplemente mirando una fachada de pizarra natural”, asegura el arquitecto.
PRODUCTO UTILIZADO: CUPACLAD®
Caracterizado por su diseño sencillo y equilibrado, CUPACLAD® 101 LOGIC otorga el protagonismo a la textura y el brillo de nuestras pizarras naturales.
Otros casos de estudio
Con nuestra pizarra se realizan más de 250 cubiertas al día en todo el mundo. La pizarra natural de CUPA PIZARRAS es el producto mejor valorado por
arquitectos y colocadores, y ha sido seleccionada para la renovación de algunos de los monumentos más importantes del mundo.
Otros case studies
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